Nuestra DECLARACIÓN DE FE como fundamento doctrinal

La Biblia es nuestra única regla, toda suficiente, de fe y conducta. De ella se deriva la siguiente DECLARACIÓN DE FE como fundamento doctrinal que, en Iglesia Catedral de Vida, nos rige en el aprendizaje y enseñanza de la Palabra de Dios. I Corintios. 1:10; Hechos. 2:42; Efesios. 4:13.

A continuación, nuestra Declaración de Fe

Creemos:

1. En que la biblia es inspirada por Dios  y que en ella encontramos la regla de fe y conducta para la vida cristiana.
2. En un solo Dios eterno que consiste en tres personas divinas: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
3. Que Jesucristo es el unigénito Hijo de Dios, concebido por el Espíritu Santo a traves de María. Que fue crucificado, sepultado y resucito de entre los muertos.  Que ascendió al cielo y está hoy a la diestra del Padre como intercesor.
4. Que todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios y que el arrepentimiento ordenado por Dios para todos es necesario para el perdón de los pecados.
5. Que la salvación es un regalo de Dios y que debemos cuidarla para no perderla.
6. Que la justificación, la regeneración y el nuevo nacimiento se efectúan por la fe en la sangre de Jesucristo.
7. En la santificación, subsecuente al nuevo nacimiento por la fe en la sangre de Jesucristo por medio de la palabra de Dios y el Espíritu Santo.
8. Que la santidad es la norma de vida de Dios para su pueblo.
9. En el bautismo en el Espíritu Santo subsecuente a la limpieza del corazón.
10. En hablar en otras lenguas, como el Espíritu dirija a la persona, lo cual es la evidencia inicial del bautismo en el Espíritu Santo.
11. En el bautismo en agua por inmersión y que todos los que se arrepienten deben ser bautizados obedeciendo el mandato de Jesús y bautizados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
12. Que la sanidad divina es provista para todos en la expiación.
13. En la cena del Señor y el lavatorio de los pies de los santos
14. En la premilenial segunda venida de Jesús:
    1. Primero para resucitar a los justos muertos y arrebatar a los santos vivos hacia El en el aire.
    2. Segundo, para reinar en la tierra mil años.
15. En la resurrección corporal, vida eterna para los justos y castigo eterno para los inicuos.